Anem a la Xina a trobar-nos amb la SARA //// Vamos a China a encontrarnos con SARA

domingo, septiembre 24, 2006

Todas las Chinas en una

El día de hoy ha sido agotador. En pocas horas hemos pasado de la China imperial, a la China comunista, a la China olímpica y a la China capitalista.

Hemos ido a ver la Ciudad Prohibida de Beijing. Era la residencia del emperador, la emperatriz y las concubinas de China. Y su acceso estaba prohibido a cualquier otra persona que no fueran los ministros y altos funcionarios del emperador, así como sus miles de sirvientes.




Para no ofender al Ser Supremo, que habita en el cielo un palacio de 10.000 habitaciones, el emperador hizo construir en Beijing una serie de palacios que sólo tienen... 9.999 habitaciones y media. Dentro de la ciudad prohibida se extienden muchos pabellones, patios interiores, escaleras... es el conjunto palacial mayor del mundo.



Pero para llegar a la entrada de la Ciudad Prohibida, antes hay que pasar por la plaza de Tian’anmen, que además de ser una plaza inmensa es un símbolo no sólo para Beijing, sino para China como nación. Para los chinos la experiencia de haber estado aquí es muy importante, ya que su significado histórico es algo profundamente sentido. Y damos fe de que el 99 por ciento de los miles de personas que había esta mañana en la plaza eran chinos, que estaban orgullosos y nerviosos por estar ahí y fotografiarse toda la familia delante del mausoleo de Mao o con la puerta de Tian’anmen al fondo.


Durante la época imperial esta puerta era la primera entrada a la Ciudad Prohibida y donde normalmente se proclamaban los edictos imperiales. Por esta razón parecía la más apropiada para que Mao Zedong proclamara la República Popular China, el 1 de octubre de 1949. Toda la plaza esta mañana estaba llena de operarios que estaban decorándola para la celebración el próximo 1 de octubre de la Fiesta Nacional de la Proclamación de la República.


Todas las niñas adoptadas en China pasean sus sillitas por la plaza de Tian’anmen con sus nuevos padres. Nosotros hoy éramos un grupo numeroso, porque además de las nuestras había otro grupo de familias adoptantes españolas que formaban otra expedición. Y no os podéis imaginar cómo nos miraban todos y se acercaban y se fotografiaban con nosotros. ¡Casi tanto como al retrato inmenso de Mao que preside la plaza!


La presencia de la próxima olimpiada “Beijing 2008” es continua. En plena plaza de Tian’anmen han colocado un reloj digital enorme que cuenta los días, horas, minutos y segundos que faltan para que empiecen los juegos olímpicos. Y frente a los símbolos nacionales de la fiesta de la república han colocado unos muñecos enormes de las 5 mascotas olímpicas. Los chinos son conscientes que esas olimpiadas serán una ocasión para llegar a todo el mundo, y se están preparando a fondo.


Por la tarde hemos ido al mercado Yashow. Es el famoso mercado de las imitaciones, donde se pueden comprar todo tipo de artículos de las más prestigiosas marcas occidentales, símbolo del capitalismo más exacerbado... pero todos falsos. Los precios son muy inferiores a los originales y a veces es difícil diferenciar unos de otros.

Lo más curioso es el sistema de regateo al que hay que someterse en las cientos de tiendecitas que forman este mercado (hasta hace unos pocos años era un “mercadillo” callejero) si quieres conseguir sus productos a una tercera parte o menos del precio que los vendedores te piden.


Nos ha sorprendido que siendo domingo no sólo el mercado sino todas las tiendas, supermercados, construcciones, etc., estuvieran abiertos y con toda la gente trabajando. Lola, nuestra guía nos ha explicado que en China todos los trabajadores hacen turnos, de 5 días a la semana, y no siempre tienen fiesta en fin de semana, con lo que todo está abierto los siete días de la semana. Solo cierran en las grandes fiestas, como la que se celebrará el 1 de octubre, o para el año nuevo chino. Por eso los chinos que montan negocios en el extranjero abren todos los días, incluso los domingos.


Con todo este ajetreo histórico las niñas han acabado agotadas, y los papás también, porqué están todas como motos. Las 10 del grupo que vinimos de AnHui han comprendido que esos señores que les dan de comer, las visten, las bañan, las achuchan y les dan besitos son siempre los mismos y que día tras día están ahí con ellas. Y se han empezado a creer que esto es Jauja.


Sara también. Tiene una marcha que no veas. Se pasa el día feliz, sonriente, hoy le hemos oído reírse, varias veces, cuando alguien se le acerca por detrás con intención de pellizcarle en el culete, o cuando su padre o su madre le mordisquean en el cuello. Está que te la comes.